Bacalao encebollado dos salsas

El bacalao es un pescado muy nutritivo y muy bajo en calorías y grasas, lo que le convierte en una opción muy sana para todos los que deben o quieren cuidarse sin renunciar a comer bien.

Acompañado por un par de salsas deliciosas y poco calóricas, tenemos un plato ideal para cualquier ocasión y sobre todo para esas cenas de fiesta que se nos aproximan, en las que no queremos acabar con sensación de pesadez, pero si queremos disfrutar de la buena mesa.

 

Ingredientes para 4 personas:

 

800g de bacalao al punto de sal (puede ser congelado)

Harina

6 cucharadas de aceite de oliva virgen extra

Puré de guisantes:

400g de guisantes (pueden ser congelados)

1 patata pequeña

Hojas de hierbabuena

Sal 

Pimienta molida

Salsa blanca de cebolla:

2 cebollas medianas

4 ajos

1/2 ají o 1 cayena

Sal

Pimienta molida

250ml de vino blanco

 

 Preparación:

 

Si el bacalao es congelado dejarlo dos horas a temperatura ambiente es suficiente para que se descongele, luego hay que dejarlo escurrir un rato y acabar secándolo todo lo posible con papel absorbente de cocina.

 

 

Lo siguiente será pasarlo por harina y con el aceite bien caliente en una sartén, dorarlo no más de medio minuto por cada lado, reservar sobre papel de cocina para que suelte el exceso de aceite.

Mientras tanto vamos a preparar las salsas, en el mismo aceite del bacalao pochamos el ajo y la cebolla cortada en juliana hasta que esté transparente, retiramos 1/3 de la cebolla y la reservamos antes de echar el vino blanco, la pimienta y la cayena, dejamos que reduzca unos minutos y añadimos el bacalao, dejamos que se cocine a fuego medio durante 5 minutos meneando de vez en cuando la sartén.

 

 

 

Retiramos el bacalao con cuidado de no romperlo y vertemos la salsa con la cebolla y demás en el vaso de la batidora, si no queremos que pique demasiado retirar la cayena, trituramos hasta obtener una salsa ligada, reservar.

 

Para hacer el puré de guisantes los ponemos a cocer, junto con la patata, en una olla con agua hirviendo y un pellizco de sal, si son congelados contar 10 minutos desde que el agua vuelva a hervir, una vez listos reservamos un puñado y trituramos el resto junto con la patata, 4 hojas de hierbabuena y la pimienta, si queda demasiado espeso añadir un chorrito de agua de la cocción, probar y rectificar de sal si fuera necesario.

 

Ya solo queda emplatar, ponemos en el fondo del plato el puré de guisantes y encima el bacalao, napamos con la salsa de cebolla y encima de esta colocamos la cebolla pochada y los guisantes que habíamos reservado, adornamos con unas hojitas de hierbabuena y con un tenedor ligeramente manchado en salsa de cebolla marcamos unos puntitos de adorno sobre el puré de guisantes. 

Además de ser ligera esta receta es muy sabrosa gracias al contraste de las dos salsas, una, la de cebolla, con un ligero toque picante, y otra, el puré de guisantes, con un sabor fresco gracias a la hierbabuena, el resultado es una verdadera delicia.

 

 

Truco sano: el puré de guisante se hace con mantequilla, que hemos sustituido por la patata cocida lo que reduce mucho la cantidad de grasa y calorías, ambas salsas aportan vitaminas y fibra que completan los valores nutricionales de este plato.

Para aligerar aún más la receta se puede evitar enharinar y dorar el bacalao e introducirlo directamente en la salsa para que se cocine.

Buen provecho.