Pollo en pepitoria

Esta receta me recuerda mucho a mi casa, a mí madre siempre le quedaba riquísimo y yo procuro hacerlo exactamente igual que ella, ¿preparados para chuparse los dedos?

Ingredientes:

1 pollo troceado (puede ser congelado)
1 cebolla mediana
8 almendras crudas peladas
2 dientes de ajo grandes
2 huevos cocidos
1 rama de perejil
Ralladura de nuez moscada
Azafrán
Caldo de pollo o una pastilla de caldo
Aceite de oliva virgen extra
Harina
Sal

 Preparación:

Sopa o caldo de pollo

Enharinamos el pollo y lo doramos en una cacerola con un chorro de aceite de oliva, solo dorarlo que no se haga mucho porque luego tiene que cocer, lo sacamos y reservamos.

En el mismo aceite ponemos las almendras y en cuanto empiecen a tomar color las sacamos y las ponemos en un mortero para machacarlas, junto con el perejil picado, los ajos y el azafrán tostado.

Picamos la cebolla en daditos muy pequeños y la pochamos, agregamos el majado del mortero e inmediatamente un chorro de caldo, deshacemos las yemas de huevo, picamos las claras y las añadimos también removiendo todo para que tanto el majado como las yemas se deshagan en el caldo.

Ponemos la sal y la ralladura de nuez moscada removemos y colocamos el pollo en la cazuela, lo cubrimos con caldo y dejamos cocer a fuego medio-alto 10 minutos, probamos y rectificamos de sal si fuera necesario, dejamos cocer 10 minutos más bajando un poco el fuego y listo.

Se sirve con unas patatas fritas que mojadas en la salsa están de pecado, espero que os animéis a comentar si os ha gustado.

Las yemas espesan la salsa pero si se os va la mano con el caldo y está demasiado líquida tostar una cucharada de harina de una sartén, sin aceite y cuidando que no oscurezca y se queme, y la añadís a la cazuela.

Truco sano:

Para que resulte un guiso más ligero yo le quito la piel al pollo y no lo paso por harina, el sabor no varía nada y solo cambia un poco la estética, pero como veis en la foto sigue estando de muy buen ver.

Receta de tuper:

El único inconveniente son las patatas fritas, tanto llevándolas mezcladas con el pollo como haciéndolo aparte no estarán en su punto, una solución puede ser incorporarlas crudas a la cazuela mientras se hace el guiso para que se cocinen en la salsa, así de paso evitamos el aceite que chupan al freírlas.

Buen provecho.