Tiramisú Toscano

Del tiramisú hay cientos de versiones y de todas las que probé esta es para mi gusto la mejor, original de la región de la Toscana se hace básicamente con los mismos ingredientes, pero la textura es distinta al no llevar claras montadas y muy poca o nada de nata, esto es opcional, el resultado es una crema sabrosísima con menos aire que las habituales y algo parecida a la crema pastelera, probarlo y disfrutareis de la diferencia.
Cuarta receta del menú "Primer Aniversario" del blog.

Ingredientes para 4 raciones ó 6 vasitos:

250g de mascarpone
100 ml de nata (opcional)
3 cucharadas de licor amaretto (opcional)
2 tazas de café fuerte
bizcochos de soletilla
40 g de azúcar
1 cucharadita de azúcar glas para la nata
3 yemas de huevo
Cacao en polvo amargo o café molido muy fino.

Preparación:

Lo primero es hacer el café y dejar que se enfríe mientras preparamos la crema, para lo que separamos las yemas de las claras (que no vamos a usar pero podéis guardarlas para cualquier otra receta),  las ponemos en un bol junto con el azúcar y batimos con las varillas hasta que queden cremosas y con el azúcar totalmente disuelto, si esto no se hace bien quedará con una textura terrosa nada agradable al paladar, aparte montamos la nata con la cucharadita de azúcar glas y reservamos.

A continuación incorporamos el queso mascarpone y el amaretto y volvemos a batir con las varillas para que se integren bien, por último añadimos la nata montada y mezclamos con movimientos envolventes de arriba a abajo con la ayuda de una espátula de silicona, nunca con varillas o la nata perderá el punto, como os dije antes poner nata o no es opcional, se trata nada más que de darle un poco más de cremosidad a la mezcla pero apenas variará el sabor, con el amaretto es distinto, se puede hacer sin el licor perfectamente y también quedará muy rico, pero a mí el toque de las almendras amargas en este postre me encanta, por eso lo he incluido.

Ahora solo tenemos que ir mojando los bizcochos en el café, pero con tiento o se empaparán demasiado y se romperán, y colocándolos en la fuente o molde elegido, cubriéndolos después con una generosa capa de crema, repetimos la misma operación siempre terminando con una capa de crema, una vez montado metemos en la nevera bien tapado durante un par de horas mínimo para que se refresque y se asiente bien.

Antes de servirlo espolvoreamos el cacao amargo con la ayuda de un colador para que la cobertura quede uniforme y sin bolitas, no cubrir con el cacao cuando lo vayáis a guardar en la nevera o se estropeará con la humedad, hay quién sustituye el cacao por café molido muy fino, lo que le da un sabor y aroma diferentes.

Adornamos con unos granos de café y con un poco de cacao espolvoreado en el plato.

Si optamos por los vasos con estas cantidades saldrán 6, no son vasos de chupito si no vasos bajos de vino por lo que las raciones seguirán siendo de buen tamaño, se preparan exactamente de la misma manera, yo los decoré con una galletas mini que me parecían graciosas, pero se puede optar por cualquier otra cosa que tengáis a mano y que os guste más.

Buen provecho.