Trufas con toque amargo

Estas trufas se hacen en un momento y son el remate dulce ideal para cualquier comida o cena, con un café forman el binomio perfecto, ya las hicimos para halloween pero ahora serán algo distintas, con un toque para adultos gracias al licor, en navidad complementarán a la perfección los postres típicos que saquéis a la mesa.

Ingredientes para 15-16 trufas:

250g de migas de bizcocho o magdalenas
125g de chocolate negro 70% cacao
25ml de nata o leche
25ml de ron o coñac
Unas gotas de esencia de ron (para sustituir al licor si no queréis alcohol)
75g de fruta confitada picada
Cacao amargo en polvo

Preparación:

Para las migas que necesitamos podemos reutilizar bizcocho o magdalenas que nos queden de días anteriores y estén algo duros, si no tenemos no hace falta complicarse haciéndolos, podemos comprarlos y ya está, sobre todo si estamos preparando más cosas y tenemos mucho lío en la cocina.

Desmenuzamos el bizcocho y lo ponemos en un bol, le añadimos la nata y el licor, la fruta escarchada y mezclamos bien.

Troceamos el chocolate y lo fundimos en el microondas, a golpes de 30 segundos para que no se queme, ir controlando hasta que esté fundido y lo podamos remover con la cuchara sin que queden tropezones, lo sacamos y se lo añadimos a la mezcla anterior y revolvemos hasta conseguir una mezcla homogénea.

Forramos una bandeja con papel de horno y vamos colocando en ella las bolas que haremos a mano, así luego no nos costará despegarlas, tomando como medida una cuchara de sopa que no sea demasiado grande, ya que todas no tienen el mismo tamaño puede que no os salgan la misma cantidad de trufas que a mí, una vez terminadas las metemos en la nevera durante media hora.

Pasado este tiempo las sacamos y las rebozamos en el cacao amargo, este contraste entre el dulce de la trufa y el amargor del cacao es delicioso, es recomendable rebozarlas de nuevo pasado un rato porque al dejarlas a temperatura ambiente las trufas "sudarán un poco" y absorberán la cobertura, aunque lo indicado es volver a guardarlas en la nevera hasta que vayamos a comerlas, y sacarlas unos minutos antes para que se templen.

A veces cuesta un poco encontrar el cacao pero en las grandes superficies suelen tenerlo como "cacao puro sin azúcares añadidos", pero una vez conseguido cunde muchísimo y podréis utilizarlo para multitud postres, además no se estropea así que dura mucho tiempo en la despensa.

La textura de estas trufas no es ligera, es parecida al brownie, si queréis que queden más cremosas añadir un poco más de nata y montarla, mezclarla con el resto de ingredientes con cuidado de que no pierda el punto y hacer las bolas, aunque esto hará más complicado darle forma a las trufas porque la masa será menos compacta, y a mi parecer no merece la pena porque tal como quedan están buenísimas.

Trucos de cocina: el chocolate es muy sensible al exceso de temperatura y por eso es muy fácil que se queme si se nos va la mano, si ocurre ese desastre aún tenemos la oportunidad de solucionarlo.
Hay que enfriarlo lo más rápido posible, para ello cambiaremos el chocolate a otro recipiente que esté completamente seco, añadimos unos trozos de chocolate y removemos para que se funda, esto bajará inmediatamente la temperatura.
Si sigue sin recuperarse del todo y tiene una textura grumosa, ponerle una cucharada de aceite suave vegetal por cada 150-160 gramos de chocolate y batir hasta que se incorpore completamente a la mezcla.
Una última opción si aún se nos resiste es utilizar la batidora hasta que consigamos que emulsione completamente y recupere el aspecto que debería tener.
Y para la próxima vez ser más cuidadosos a la hora de fundir el chocolate es el mejor truco para evitar que esto vuelva a ocurrir.

Buen provecho.


Un mes más esta receta figurará en el proyecto de "En buena onda" que dirigen Elisa de "Que no te falte un perejil" y Marisa G de Thermofan, en el enlace bajo la imagen encontrareis el recopilatorio de todas las recetas que se han publicado.

Recopilatorio en buena onda

Buen provecho.