Tortilla en 3 vuelcos

Hay millones de tortillas distintas, la combinación de ingredientes es infinita, pero a veces la variedad no se debe tanto a lo que les pongamos, si no a la forma de hacerlas, eso no hace que sepan distinto pero si que cambia su aspecto para hacerlas más atractivas, y a la hora de comer todo cuenta.

Que la comida entra primero por los ojos es una realidad, por eso esforzarse en mejorar su apariencia, bien sea haciéndola más divertida o seductora también es importante, aunque no siempre consigo transmitir eso porque las fotos no son mi fuerte, espero que al menos os pique la curiosidad jajaja

 

 

 

Ingredientes para 2 personas:

4 huevos

tomate deshidratado

queso mozzarella

cebolla confitada

orégano

sal

taquitos de jamón o bacon

aceite de oliva virgen extra

Preparación:

 

Primero vamos a hidratar  los tomates poniéndolos en un chorrito de aceite, se pueden añadir directamente a la tortilla si os gusta que queden un poco crujientes, yo los prefiero así pero por si a alguien le gustan más blanditos no os saltéis este paso, no es necesario tenerlos mucho tiempo, en lo que sacáis el resto de ingredientes de la nevera y preparáis todo será suficiente.

 

 

 

Mientras batimos los huevos con una pizca de sal, colar los tomates para que escurran un poco y reservar el aceite, porque será el que usemos para hacer la tortilla. Con una brocha pintamos de aceite la sartén y la ponemos a fuego medio/bajo, cuando esté caliente echamos 1/3 de los huevos aproximadamente, lo suficiente para cubrir todo el fondo de la sartén (una de 24 cm) y dejamos que cuajen un poquito antes de ponerles orégano y mozzarella, dejamos que siga haciéndose lentamente hasta que veamos que están cremosos, ese punto en el que dejan de estar líquidos pero no se han cuajado del todo, para que sea más rápido podéis tapar la sartén, la doblamos por la mitad, este es el primer vuelco.

 

Ahora echamos la mitad de los huevos que nos quedan en la parte vacía de la sartén, sin mover para nada la que ya tenemos hecha, seguimos los mismos pasos que antes, cuando veamos que han cuajado un poquito añadimos los taquitos de jamón, seguimos cocinando hasta ver que los huevos están cremosos y con la ayuda de una espátula volteamos la primera tortilla sobre la nueva, de manera que ahora nos queda libre la otra mitad de la sartén, este es el segundo vuelco.

 

 

Seguro que habéis adivinado lo que viene ahora jajaja, pues tenéis razón, hay que echar los huevos restantes en la zona libre de la sartén, de nuevo seguimos los mismos pasos, en cuanto veamos que han cuajado un poco ponemos los tomates y la cebolla confitada, dejamos que sigan cuajando lentamente hasta que estén cremosos y volteamos la tortilla sobre esta última que hemos hecho, un par de minutos más en esta posición y ya podemos retirarla del fuego y emplatar, este es el tercer vuelco.

 

 

Básicamente lo que conseguimos haciéndola de esta manera es que quede más jugosa, no me preguntéis por qué pero es cierto, quizá el secreto sea que cada una de las tres etapas se hace en muy poquito tiempo, sin dar opción a que cuaje demasiado y quede seca.

Obviamente podéis variar los ingredientes a vuestro gusto, aunque esta combinación queda muy muy rica, la cebolla confitada (que no caramelizada porque no le añadí azúcar), le aporta un extra de sabor y jugosidad, la cebolla siempre hace que las tortillas queden más jugosas.

 

 

 

No he puesto cantidades porque son de libre elección, en casa preferimos no cargarlas demasiado pero eso es al gusto de cada uno, si ponéis más en el corte se verán con más claridad las tres capas de la tortilla.

Buen provecho.

Esta será mi primera receta del año para "El Club de la Tortilla Perfecta" de mi amiga Concha Cabello, del que formo parte desde hace poco y que me encanta, jamás imaginé que pudiera haber tal cantidad de tortillas distintas, deliciosas y como dice el nombre, perfectas.

Os dejo el enlace, no dejéis de pasaros y echar un vistazo porque merece muchísimo la pena.

 

El Club de la Tortilla Perfecta