Mini aguacates rellenos de tartar de bacalao

Los aguacates mini están de moda, cada vez es más fácil encontrarlos en los mercados y la verdad es que son perfectos para preparar un buen aperitivo.
Rellenos con la delicada y sorprendente mezcla de sabores de este tartar de bacalao y naranja,  serán un bocado sano y exquisito que os hará relameros de gusto, y triunfar en cualquier cóctel o comida informal.
Esta es la primera receta del menú "Segundo Aniversario" del blog, en los próximos días publicaré el resto.

Ingredientes para 3 mini aguacates:

3 mini aguacates
1 trozo de bacalao desalado crudo (puede ser congelado)
Zumo y gajos de naranja
Unas gotas de lima o limón
1/4 de cucharadita de canela en polvo
1 cucharadita de jengibre fresco ó 1/2 en polvo
Unas hojas de hierbabuena
1 cucharadita de crema de vinagre de módena
Aceite de oliva virgen extra
Sal

Preparación:

No todos los aguacates mini son iguales, los hay del tamaño de un limón y también del de una aceituna grande, y entre estos dos hay varios más, los que yo compré son justo el tamaño intermedio, por eso las cantidades solo son orientativas y tendréis que calcular un poco a ojo dependiendo de como sean los vuestros.

Cuando pensaba como iba a prepararlos recordé que tenía un sobrante de bacalao ya desalado y congelado, y en base a eso fuí eligiendo el resto de ingredientes, la cocina es un laboratorio en el que experimentamos con diferentes fórmulas que a veces acaban en fracaso, tengo que decir que en este caso a la primera fué la vencida, porque nos encantó el resultado, confío en que a vosotr@s también.

Partimos de un trozo de bacalao al punto de sal, da igual que lo hayáis desalado en casa o comprado ya preparado, lo dejamos escurrir y secamos todo lo posible con papel absorbente de cocina, un bacalao aguado puede arruinar el tartar, limpiamos de pieles y espinas y desmenuzamos con los dedos, no uséis picadora ni batidora porque no queremos un puré, si no pequeños trocitos de pescado que ponemos en un bol con un chorrito de zumo de naranja, para que se vayan macerando mientras preparamos el resto de ingredientes.

Cortamos pequeños dados de naranja sin piel ni cáscara, rallamos un poco de jengibre fresco, picamos unas hojas de hierbabuena y lo añadimos todo al bol, ahora aliñamos con la canela, vinagre de módena y un chorrito de aceite, mezclamos bien y probamos por si es necesario ponerle una pizca de sal, esto es muy importante porque a veces el bacalao, si se nos ha ido la mano con el desalado está realmente soso, tapamos y reservamos.

 Mientras reposa la mezcla vamos a preparar los aguacates, los lavamos y cortamos por la mitad con cuidado de no romper las cáscaras, ya que vamos a usarlas como recipiente, retiramos los huesos y sacamos la carne con la ayuda de una cuchara (fijaros en que la cuchara es de postre, así podéis haceros una idea bastante aproximada del tamaño de los aguacates).

Cortamos en trozos que acabaremos machacando con  la ayuda de un tenedor y ponemos unas gotas de limón para evitar la oxidación, juntamos el contenido de los boles y rellenamos con esta mezcla las cáscaras de aguacate.

Yo opté por cortar unas pequeñas cuñas de naranja para adornarlos, pero simplemente con un poco de cáscara rallada o una hojita de hierbabuena también quedarán muy bien.

Bueno pues ya habéis visto lo rápido y fácil que se prepara este aperitivo tan rico, sano y original que no dudo se convertirá en recurrente cuando preparéis una mesa de picoteo, y si no encontráis aguacates mini  hacerlo igualmente con los grandes, siempre se puede adaptar si lo servís para mojar con nachos o pan de pita, o untado en pan tostado.

 Comer sano: El aguacate aporta ácidos grasos esenciales, ayuda a controlar el colesterol al ser una grasa vegetal con propiedades casi idénticas al aceite de oliva, va bien para la piel y la vista, rico en vitaminas y minerales y sin hidratos es perfecto para dietas, deportistas y embarazadas, y sustituye maravillosamente bien a la margarina y mantequilla en muchas recetas, se puede decir que es una fruta todo terreno en la cocina, hasta la semilla se puede aprovechar: si la ponéis sobre un vaso lleno de agua, sujeta con 4 palillos para que solo roce la superficie, acabareis teniendo una planta muy bonita.

Buen provecho.


Cuando de recetas de aprovechamiento se trata no hay mejor lugar que  1+/- 100, desperdicio 0, pasaros y echar un vistazo, os va a encantar.

Recopilatorio 1 +/-100, desperdicio 0