Crema de garbanzos con huevos poché

Con este frío lo que más apetece son las comidas calentitas y sabrosas, normalmente pensamos que quizá nos quedemos con hambre si recurrimos a recetas como esta, pero en este caso no es así.

Las legumbres son ideales para hacer cremas o purés, porque además de ser la forma más sana de tomarlas, sin acompañamientos que sean pesados y grasientos, es que son muy nutritivas y aportan gran cantidad de fibra, lo que las hace muy saciantes, así además podemos incorporar con más facilidad a nuestra dieta las tres raciones semanales recomendadas.

Ingredientes para 4 personas:

400g de garbanzos (pueden ser de bote)
1 cebolla grande
1 zanahoria grande
2 dientes de ajo
1 rama de perejil
1 hoja de laurel
1 cucharadita de pimentón
1 cucharadita de comino molido
1 cucharadita de pimienta molida
Caldo de pollo o verduras (o pastilla de caldo y agua)
Limón
Sal
Aceite de oliva virgen extra
12 huevos de codorniz
Sal de jamón 

 

 

Preparación:

 

Sal de jamón 

Huevos poché 

 

En esta ocasión utilicé garbanzos sobrantes de un cocido, hice demasiados y había que aprovecharlos, pero con un bote de garbanzos cocidos también queda genial, sobre todo ahorramos tiempo porque nos ahorramos el remojo previo y el cocinado más largo, que con garbanzos normales remojados tardaría más, aunque siempre que se pueda mejor cocerlos en casa.

 

Lavar, pelar y picar todas las verduras y el perejil y pochar en una olla con un chorrito de aceite a fuego medio, esta receta se puede preparar también con las verduras en crudo, pero así gana mucho en sabor.

 

Cuando estén en su punto ponemos la pimienta y el comino junto con la hoja de laurel, le damos un par de vueltas para que al tostarlas desprendan más aroma y sabor y agregamos los garbanzos, reservar unos cuantos para adornar el plato. 

 

Retiramos la olla del fuego ponemos el pimentón y removemos, para que no se queme inmediatamente regamos con el caldo, el suficiente para cubrir los garbanzos, sal y un chorrito de limón, volvemos a ponerla al fuego y dejamos cocer tapado unos 20 minutos a fuego medio, si usamos garbanzos ya cocidos en este tiempo las verduras estarán listas, si no tardaremos bastante más, en cuyo caso yo usaría la olla rápida para abreviar, necesitaríamos unos 30 minutos a máxima potencia.

 

 

Mientras tanto preparamos los huevos poché, lo que nos llevará 2 ó 3 minutos, pero en pelarlos que es lo más latoso tardaremos más, os he dejado el enlace más arriba donde os explico con detalle la forma más eficiente y rápida de hacerlo, ya que podremos escalfar 12 huevos o más de una sola vez.

 

Solo falta ya triturar la crema, a la que se le puede añadir más caldo hasta conseguir el espesor que más nos guste, y adornar el plato con los garbanzos reservados, los huevos poché (corté uno para que se viera la yema), un poco de sal de jamón que le da un toque riquísimo, y perejil picado.

 

 

 

Esta crema puede encajar perfectamente en una dieta vegana o vegetariana, eliminando la sal de jamón, y sustituyendo los huevos por frutos secos como avellanas o nueces, para complementar el aporte de proteínas.

 

También es una receta sana y baja en calorías, que además es cómoda para comer fuera de casa, solo hay que calentarla un poquito y listo.

 

Buen provecho.

 

 

Como es una receta de aprovechamiento (por los garbanzos), estoy encantada de poder enviarla a "1+/-100 desperdicio 0" , el proyecto que capitanea mi buena amiga Marisa G., al que como siempre os recomiendo que no dejéis de visitar porque se pueden aprender muchas cosas interesantes.

 

 

Recopilatorio 1 +/-100, desperdicio 0