Gelatina de naranja y frutos rojos, sin azúcar

Este postre lo encontré de casualidad buscando recetas para las maravillosas naranjas que gané, como parte del premio del concurso de Marisa, por el 10ª aniversario de Thermofan, tenía ganas de hacer algo especial con ellas y me topé con una página "dulces diabéticos", que tiene un montón de recetas chulas.

Me pareció sencillo pero con encanto y con pinta de estar muy rico, así que pensando que a Marisa le gustaría me animé a probar, lo cierto es que creo que os va a encantar, seáis diabéticos o no, porque además de evitar tomar azúcar es muy refrescante y creo que a los niños, que les aburre comer fruta, les va a hacer gracia.

 

Ingredientes para 16 porciones:

2 naranjas grandes

1/2 limón

Hojas de gelatina neutra

Eritritol o stevia al gusto

Arándanos y frambuesas

Preparación:

Antes de empezar aclaremos algo: no he puesto cantidades en los ingredientes porque el tamaño de las naranjas no será siempre el mismo, y la cantidad de zumo tampoco, por eso lo importante es saber que para 250ml de líquido se necesitan 3 hojas de gelatina, en base a eso calcular según la cantidad de zumo que tengáis y consultar siempre las indicaciones del paquete de gelatina que uséis. 

Lavar bien las naranjas porque vamos a usar las cáscaras como recipiente para la gelatina, así queda más gracioso y original pero siempre se pueden utilizar vasos o moldes para darle formas diferentes.

 

 

 

Ponemos a hidratar la gelatina en agua fría mientras cortamos a la mitad y exprimimos las naranjas, reservamos el zumo y con la ayuda de una cucharilla limpiamos el interior de las cáscaras retirando los restos de pulpa, exprimimos el medio limón y mezclamos con la naranja.

Calentamos el zumo a máxima potencia en el microondas 1 minuto, escurrimos la gelatina y se la añadimos junto con el edulcorante y removemos hasta que se deshaga totalmente, rellenamos con esta mezcla las medias naranjas y a continuación le ponemos a cada una los frutos rojos necesarios, hasta que el zumo llegue al borde, es normal que floten al principio pero luego irán bajando y se repartirán por toda la cáscara.

Las llevamos a la nevera hasta que la gelatina solidifique, dependiendo de la temperatura tardará entre 3 y 4 horas, para que no se vuelquen y se salga el zumo colocar cada media naranja en un cuenco que sea más o menos del mismo tamaño, así evitamos accidentes dentro del frigo. 

 

 

Una vez endurecida la gelatina sacamos de la nevera y las cortamos cuartos, así por cada naranja tendremos 8 gajos de buen tamaño, es preferible no cortarlas hasta el momento de servir, pero si os sobran no pasa nada porque se conservan muy bien durante varios días guardadas en tu tuper, aunque sinceramente no creo que os sobren muchas jajaja.

En la receta original usaban arándanos y frambuesas, yo hice lo mismo porque suelo tener siempre en casa, bien sean frescas o congeladas, pero la fruta que le pongáis puede ser cualquier otra, teniendo en cuenta que algunas como la piña, kiwis, papayas e higos no pueden usarse a no ser que estén cocidas, peladas o en conserva, porque tienen una enzima que disuelve la gelatina e impide que cuaje, pero esta información suele venir en los paquetes.

 

 

Comer sano: la gelatina puede incluirse en cualquier dieta porque es saciante, no aporta azúcar ni grasas y tiene poquísimas calorías, por contra es rica en proteínas, aminoácidos y minerales, el colágeno que contiene ayuda a mantener en buena forma las articulaciones y también favorece a la piel, el pelo y las uñas, todo esto no puede aplicarse en su totalidad a los postres de gelatina industrial que se compran preparados, porque tienen otra composición en la que se añaden azúcares, conservantes, etc...

Los veganos pueden sustituir la gelatina por agar-agar. 

¡¡Me olvidaba!! si las naranjas son dulces no necesitarán ni azúcar ni edulcorante, a no ser que os gusten los postres muy dulzones.

Buen provecho