Como hacer abono reciclando restos

Todos tenemos alguna planta en casa, y lo que también tenemos a diario son restos de frutas, verduras, huevos etc... cuando cocinamos desechamos muchas cosas que hoy vamos a reutilizar en lugar de tirarlas a la basura.

No todos los aprovechamientos que hacemos en la cocina tienen que ser para comer, muchas veces podemos hacer otras cosas con los restos que originamos que también son muy interesantes, en este caso vamos a "alimentar y curar" a nuestras plantas para que estén sanas y preciosas, de manera natural, ecológica y económica, que tampoco está nada mal.

 

Necesitamos:

Pieles de cebolla
Cáscaras de huevo
Posos de café
Cáscara de plátano
Agua de arroz
Colillas de cigarrillos

Pieles de cebolla:

No hay nada más fácil que ir guardándolas en una bolsa hasta tener un buen puñado, solo necesitaremos eso para hacer un abono válido para plantas de exterior e interior, que les aportará potasio, calcio, magnesio, hierro, cobre, vitaminas y además es fungicida y anti bacterias.

Todos estos nutrientes ayudarán tanto a que crezcan como a que mejore la floración.

Es un abono suave que usaremos directamente sin diluir como agua de riego cada 10/15 días, si hacemos mucho lo conservaremos en la nevera durante 2 ó 3 semanas.

Por cada litro de agua necesitamos dos puñados de pieles que desmenuzaremos un poco con la mano, las ponemos en el líquido y las dejamos reposar 24 horas a temperatura ambiente.

Pasadas las 24 horas solo hay que colar el líquido, que ya tendrá un bonito color, y guardarlo en un tarro o botella, preferiblemente de cristal, taparlo y meterlo en la nevera hasta que lo usemos para regar.

Cáscaras de huevo:

Este abono está indicado para plantas suculentas y cactus que son las que más calcio necesitan, además también les daremos fósforo, potasio, hierro y magnesio, que ayudarán a su crecimiento.

No es necesario acumular muchas porque solo con las cáscaras de un par de huevos tenemos suficiente para hacer bastante cantidad, y porque este tipo de plantas no es conveniente abonarlas más de 1 ó 2 veces al año, preferiblemente en primavera, durante su crecimiento y floración.

Lo que haremos será lavarlas para eliminar cualquier resto de huevo o suciedad, que pueden producir mal olor, y dejarlas secar, hay dos formas de prepararlas:

1- Trituradas: las dejaremos secar muy muy bien antes de triturarlas con un molinillo de café preferiblemente, cuanto más fino quede mejor, y mezclaremos este polvillo con la tierra de las macetas, hay que regar inmediatamente después para que se absorba bien.

Tardan muchos meses en descomponerse por lo que irán liberando los nutrientes muy poco a poco, y por eso no es recomendable abonarlas más de 1 ó 2 veces al año, la ventaja de este método es que lo que sobre se conserva sin estropearse casi eternamente, guardado en un bote de cristal sin necesitar frío.

2- En infusión: no es necesario dejarlas secar ya que vamos a cocerlas pero si lavarlas, luego solo hay que espachurrarlas un poco con las manos y poner 2 cucharadas de cáscaras por cada 4 litros de agua.

Cocemos durante 10 minutos y retiramos con una cuchara la espumilla que flota en la superficie, dejamos reposar sin sacarlas de líquido durante 24 horas, colamos y guardamos en botella o tarro de cristal, con este líquido podemos regar las plantas directamente, pero recordar que al igual que con el polvillo, solo debemos hacerlo un par de veces al año, en este caso si nos sobra hay que desecharlo.

Posos de café:

El café aporta al compost de nuestras plantas nitrógeno, potasio, fósforo y otros nutrientes, además de alejar a las hormigas y babosas y aumentar el drenaje y retención de agua.

 Pero hay que usarlo con tacto porque aumenta la acidez del sustrato, y eso va muy bien para plantas como rosales, azaleas, gardenias, hortensias, zanahorias y en general todas las plantas a las que favorece vivir en un medio de ph alto, pero no para el resto, se puede usar de dos maneras:

1- Mezclando los posos directamente con la tierra o espolvoreándolos por encima, así conseguiremos lo que comentábamos antes aumentar el drenaje y la retención de agua, pero no es recomendable poner demasiado, con una cucharada por maceta es más que suficiente, solo hay que dejarlos secar para que no críen moho, añadirlos y regar después.

 2- Infusionar los posos para regar con el agua resultante, para 4 litros de agua necesitareis 50g de posos de café, cocer durante 10 minutos, colar, dejar enfriar y regar, esta opción es la mejor para las plantas que no necesitan tanta acidez, también se pueden poner simplemente en remojo y dejarlo reposar durante todo un día.

Cáscara de plátano:

El plátano al igual que para las personas, es una fuente de potasio, fósforo, calcio y magnesio para nuestras macetas o huertos, es repelente de plagas, las hace más resistentes a muchas enfermedades, fortalece la raíces y los tallos y aumenta la floración y la producción de frutos, si tenéis una planta con las hojas amarillentas y con aspecto de estar quemada por el sol es por falta de potasio, con este abono se solucionará el problema.

Es un excelente repelente de pulgones por lo que va genial sobre todo para los rosales, cortar la cáscara en trocitos pequeños y enterrarlos junto a las raíces ayudará a que se libere y absorba lentamente, prolongando así sus efectos, pero además:

1- Se puede usar como agua de riego en proporción 2/1, es decir 2 cáscaras para 1 litro de agua, solo hay que cortarla en trocitos pequeños (así liberará mejor todos los nutrientes y minerales), dejarla metida en el agua durante 2 días y ya estará lista, además al seguir crudas pueden reutilizarse precisamente para enterrarlas si no tenéis otras a mano.

2- Hacer un té de plátano, no importa que las cáscaras se hayan puesto negras si no las habéis metido en la nevera, aunque es preferible ir congelándolas una vez cortadas, hasta que tengamos la cantidad necesaria según los litros de agua que necesitemos.

No es necesario descongelarlas, ponerlas directamente en el agua hirviendo 4 cáscaras cortadas por 1 litro de agua, cocer durante 15 minutos y dejar enfriar dentro del líquido, colar y diluir con el agua de riego, osea 1 litro de té por 1 litro de agua, este té también sirve para pulverizar las plantas y repeler los pulgones.

3- Secar las cáscaras al sol y pulverizarlas, preferiblemente con molinillo de café, guardar en un tarro de cristal y esparcir sobre la tierra cada cierto tiempo antes de regar.
Este polvillo es estupendo sobre todo para impulsar el crecimiento de esquejes o brotes conseguidos a partir de semillas.

Agua de arroz:

El agua de arroz no es realmente un abono si no un revitalizante para plantas, por eso no lo sustituye pero si lo complementa de maravilla, sirve para todo tipo de plantas incluidas las de huerto, y es especialmente recomendable para las orquídeas según dicen los expertos, porque se consiguen mejores floraciones.

Básicamente el agua de arroz es un concentrado de almidón y en menor proporción tiene minerales, proteínas y vitaminas, pero es precisamente el almidón lo más interesante porque es una reserva de energía que las plantas producen y acumulan con la fotosíntesis, por eso este aporte extra es beneficioso para todas y sobre todo para las plantas que crecen en los lugares más sombríos de la casa, y que por tanto están más débiles y deslucidas, se consigue de dos formas:

1- Lavando el arroz antes de cocinarlo, ponemos 3 partes de agua por 1 arroz en un recipiente, revolvemos con la mano durante medio minuto y veremos que el agua se vuelve blanca, esto es porque la mayor parte del almidón ha quedado en el líquido, la colamos y ya está lista para regar, de paso habremos preparado el arroz para que al cocerlo quede más suelto, eso sí, no lo hagáis si vais a preparar un risotto jajaja, se utiliza sin diluir una vez cada 15 días.

2.- Aprovechando el agua de cocer el arroz, siempre sin ponerle sal o especias que son perjudiciales para las plantas, cuando el arroz esté listo colar el líquido y dejar que se enfríe por completo, se puede usar sola o mezclándola con el agua del lavado que hicimos antes, las dos hay que utilizarlas en el día, no se puede almacenar porque el almidón pierde propiedades muy rápidamente.

Colillas de cigarrillos:

Ya se que me vais a decir que fumar es una guarrería jajaja, y tenéis razón pero si como yo aún practicáis este vicio, o vivís con alguien que lo hace, al menos sacarle algún beneficio saludable como es cuidar de nuestras plantas favoritas.

La nicotina es un buen abono y a la vez un eficaz insecticida, pero en este caso solo para plantas decorativas y no para las que den frutos comestibles, obviamente todos sabemos por qué, se prepara así:

1- Por un lado la ceniza acumulada puede esparcirse directamente sobre la tierra para abonarla y luego hay que regar para que se absorba, de manera que si no tenéis ceniceros y os llega un invitado que quiera fumar no lo dudéis, podéis ponerle delante una maceta para que deje en ella la ceniza de su cigarrillo, es cierto que quedará un tanto raro pero matas dos pájaros de un tiro jajaja, o mejor guarda la ceniza y ya la usarás más tarde, también da muy buen resultado la ceniza de la barbacoa o chimenea, siempre que sea de madera natural y solo la utilicemos durante la floración.

2- La nicotina para regar la obtendremos poniendo a remojo 5 ó 6 colillas por litro de agua, dejarla reposar un par de días y luego colarla, puede usarse como agua de riego o con un pulverizador, cuidando de que no os entre en los ojos ni en la nariz, y lavandose muy bien las manos después de manipularla, especial cuidado si hay niños cerca durante su utilización, no dejar las plantas a su alcance ni al de las mascotas por si acaso, para que no las toquen mientras están húmedas.

Si la usáis como prevención de plagas y enfermedades es suficiente con regar una vez al mes y pulverizar con la misma frecuencia, si se trata de eliminar alguna plaga, (es especialmente eficaz contra los pulgones de los rosales), regar y pulverizar durante cuatro días seguidos y olvidaros hasta el mes siguiente, ojo sin encharcar la tierra que no queremos que aprendan a nadar.

Bueno pues este es mi aporte especial para el proyecto 1+/- 100, desperdicio 0 de Marisa G. de Thermofan que ahora cumple su segundo aniversario, el otro día en los comentarios de mi tortilla vaga me lanzó el guante para ver que se me ocurría para celebrarlo, y decidí hacer algo que no fuera propiamente una receta, pero que si tuviera relación con la cocina, espero haberlo conseguido y que os haya resultado útil e interesante, como siempre os dejo el enlace para que podáis ver el recopilatorio de esta interesante iniciativa.
Felicidades Marisa y que sea por muchos años más.

Recopilatorio 1 +/-100, desperdicio 0