Galletas de jengibre navideñas

Siempre he tenido curiosidad por estas típicas galletas americanas ¿os acordais del hombrecillo de jengibre de Shreck?, pero nunca me había puesto a la faena, así que este año me he decidido, ricas y simpáticas quedarán genial entre nuestros postres típicos de Navidad.

Ingredientes:

250g de harina
90g de azúcar moreno
150g de mantequilla
1 y 1/2 cucharaditas de jengibre en polvo
1 cucharadita de canela
1/2 cucharadita de nuez moscada
1/4 cucharadita de clavo en polvo
1 huevo
1/2 cucharadita de levadura química

Para decorar:
Lápices pasteleros de colores
Bolitas de chocolate cubiertas de azúcar

Preparación:

Sacamos de la nevera con antelación la mantequilla y el huevo para que estén a temperatura ambiente,

En un bol grande ponemos la harina, las especias y la levadura y removemos bien con una cuchara, añadimos el azúcar y mezclamos todo de nuevo y hacemos lo mismo con el huevo, por último agregamos la mantequilla, si no está blandita podemos darle un toque de microondas,y amasamos hasta que se hayan integrado todos los ingredientes, tapamos con papel film y metemos al frigo para que se endurezca un poco.

Esta masa es muy pegajosa y algo complicada de manipular, cuando la saquemos de la nevera y la pongamos en una superficie enharinada tendremos que amasarla de nuevo y añadir algo más de harina, poco a poco, hasta que veamos que nos se nos pega a los dedos, entonces la extendemos con un rodillo y cortamos las galletas dándoles la forma que más nos guste, yo he optado por los hombrecitos de jengibre y árboles de navidad que me parecía que eran la mejor opción para estas galletas.

Una vez cortadas las vamos colocando en la bandeja sobre un papel de hornear o tapete de silicona, y las metemos al horno durante 10 ó 12 minutos, aquí muy atentos porque el tiempo variará dependiendo del tamaño de las galletas, cuanto más grandes y gordas más tardarán, como orientación estas son todo lo contrario, mis cortapastas son pequeños y las hice finitas, en cualquier caso el momento de sacarlas es cuando los bordes empiecen a tostarse, os parecerá si las tocáis que todavía la masa está blanda, no os preocupéis que acabarán de endurecer cuando se enfríen, para lo que hay que esperar a que se templen en la misma bandeja y después pasarlas a una rejilla.

Y como olerá la cocina mientras las hacéis!!! estas galletas son muy especiadas como habéis visto y no os podéis imaginar que aroma tan rico flotará en el ambiente, ya me contareis jajaja

Ya solo queda decorarlas, podéis hacer una glasa con clara de huevo y colorantes pero de verdad que después de probar los lápices pasteleros que venden en cualquier centro comercial baratísimos no merece la pena tanto lío, además que la glasa quede bien y que sepamos utilizarla correctamente con la manga pastelera es decoración nivel experto.

Yo no me he complicado mucho la vida, he puesto los botones (bolitas de chocolate cubiertas de azúcar) antes de hornear para que queden pegados, y después he decorado el resto con los lápices y la verdad es que han quedado bastante bien no?, pero vosotros elegir como queréis decorarlas, o dejarlas tal cual que también es una opción.

Esta masa puede congelarse sin problemas si no queréis hacer un montón de galletas el mismo día, para 12 pequeñas que son las que hice de prueba solo utilicé 1/4 del total.

Ahora a disfrutar del sabor de las galletas y de la cara de sorpresa de vuestro invitados cuando las vean en la mesa, sobre todo si hay niños.

Buen provecho.